Fuck es una palabra que todos hemos oído alguna vez-sepamos inglés o no- y significa en español hacer el amor. De hecho, usamos tanto esta última palabra en castellano que pienso que podríamos publicar un diccionario de sinónimos de veinte volúmenes con palabras que signifiquen lo mismo: fornicar, copular, echar un polvo, echar un quiqui, joder, chingar, hacer el ñiqui-ñiqui (este último sólo Los Sims), coitar, sacar la preñadora… Y no se me ocurren más.
Pero no estoy escribiendo esta entrada para hablaros de mi vida sexual, ni de cómo hacerlo (más detalles sobre ésto, pinchad aquí). El otro día, leyendo una revista divulgativa sobre CIENCIA, y no sobre lo que estáis pensando, me enteré de dónde venía la palabra inglesa, fuck, para denominar este acto.
En la antigua Inglaterra la gente no podia tener sexo sin contar con el consentimiento del Rey (a menos que se tratara de un miembro de la familia real). Entonces, cuando la gente quería tener un hijo debían solicitar un permiso al monarca, quien les entregaba una placa que tenían que colgar en la puerta de casa mientras tenían relaciones sexuales. La placa decia «Fornication Under Consent of the King» (F.U.C.K.), es decir, «Fornicación bajo el consentimiento del Rey». Y de ese conjunto de palabras surgió la sigla de Fuck.
Pues hoy, sabiendo una cosa más os acostaréis, solos o acompañados, pero sabiendo una cosa más.
P.D.:No os penséis que otro día vendré a explicar el Kamasutra, porque no lo haré…